La blefaritis es una inflamación del borde de los párpados, que habitualmente compromete ambos ojos; puede ser aguda ( de corta duración ) o crónica ( de larga duración). Aunque es una condición benigna puede causar muchas molestias.
¿Cuál es su causa?
Lo más frecuente es que se asocie con una infección del borde del parpado causada por bacterias (usualmente Estafilococo) que habitualmente están presentes en la piel y en los bordes de los párpados pero que en estos pacientes encuentran un buen sustrato para crecer y colonizar para causar enfermedad. Este sustrato se asocia con una inadecuada secreción de las glándulas del párpado.
Con alguna frecuencia la Blefaritis se asocia o es parte de cuadros dermatológicos como la Dermatitis Seborreica y la Rosácea.
¿Cuáles son los síntomas de la blefaritis?
El hallazgo más común es la descamación de los bordes palpebrales. A veces esta se acompaña de enrojecimiento, inflamación, sensación de ojo seco, ojos irritados, rasquiña; en ocasiones también se presentan orzuelos y chalaziones (inflamaciones delas glándulas del párpado).
La blefaritis no afecta la visión de una forma importante a menos que la córnea esté comprometida por el proceso inflamatorio o por rascado. La inflamación en la córnea puede llevar a una ulceración, cicatrización y al crecimiento anormal de vasos sanguíneos en su superficie.
¿Cómo se trata la blefaritis?
La blefaritis generalmente es una condición crónica difícil de curar. Los episodios son recurrentes y por ello es importante entender su naturaleza para manejarla de la forma más adecuada.
La higiene palpebral es fundamental. Se puede hacer con algunos productos comerciales desarrollados para este fin. Las compresas tibias ayudan a mejorar la retención de grasa en las glándulas.
Pueden usarse ungüentos antibióticos y antinflamatorios cuando haya episodios que lo ameriten. Algunas veces se requiere el uso de antibióticos sistémicos.